Por: Marle Fabiola González
Esta dulce chica llega a Estados Unidos sola, con tan solo 17 años y $50 en su bolsillo, huyendo del peligro en su país y soñando con un mejor futuro para ella, sus padres y su pequeño hermanito de tres meses.
Al tercer día luego de su llegada, comienza el primer trabajo de su vida, afortunadamente en su país natal Venezuela contaba con todas las comodidades y por su corta edad nunca había tenido la necesidad de trabajar, pero trabajar por primera vez no fue lo duro, sino el comenzar una nueva vida personal y laboral en un país con un idioma distinto el cual ella no hablaba y sufrir por esto muchísimo rechazo, malos tratos y mucha discriminación.
Trabajando en una tienda de segunda mano, ganando solo $300 cada quince días y con un vaivén de emociones y llantos se mantiene de pie por un año aceptando que era la oportunidad que le había ofrecido la vida para comenzar y aunque fuera de a poco para ayudar a su familia.
Luego decide renunciar y consigue trabajo como mesonera en un restaurante ganando mucho menos, pero esperando compensarlo con las propinas, las cuales nunca recibió… para esos días su familia vino a visitarla y su papa viendo su necesidad decide con unos pequeños ahorros comprarle un carro usado, pero lamentablemente como a muchos, los estafaron y el carro nunca funciono.
María Paula caminaba una hora de ida y una de vuelta a su trabajo todos los días, bajo la lluvia, el calor, el frio o la nieve, pero fortaleciendo su carácter y aferrada a cumplir su sueño.
Otra amiga le sugiere que comience a trabajar como niñera, así lo hace, y en ese momento es que descubre lo hábil que es con sus manos y su gran interés por las manualidades. A los dos años decide crear Delish food y ofrecer cajas de regalos para ganar un dinero extra.
El día del padre del 2018 le encargaron dos bandejas de regalo, siguió constante ofreciendo sus productos por redes sociales porque descubrió que podía hacer grandes cosas y eso la apasionaba, para su sorpresa su negocio comienza a conocerse y a crecer, es allí cuando otra amiga le sugiere que agregue dulces a sus productos. María Paula nunca en su vida había hecho dulces, pero siguiendo el consejo, viendo las oportunidades consiguió quien le enseñara y empezó a hacerlos, los llevo a un evento y todos quedaron encantados! Es allí cuando decide formalmente incluir postres a Delish Food.
“Ha sido un cambio muy drástico lo que comenzó como un hobbie ya es mi realidad y ahora vivo de Delish Food, mi familia me apoya, me ayuda en todo y estoy orgullosa de ellos, son mis mejores críticos y porristas. Hoy en día lo que comenzó como un hobbie sigue creciendo y tiene mi estilo personal”.
“Lo más importante para mí es seguir haciendo bien mi trabajo, seguir adelante y nunca rendirme, lo hice por dos motivos, primero no podía regresarme a mi país y segundo quería darle a mi hermano todo lo que yo tuve cuando era pequeña y que mis papas ya no podían darle, quería darle todo a el y a mi familia, luchar por ellos para q no les faltara nada”