Por: Marle Fabiola González
Siempre es importante mantener una rutina para el cuidado de nuestra piel, pero es durante los meses de frio y calor extremos cuando necesitamos ese toque especial que nos brinde todo lo necesario para mantener nuestra piel humectada y radiante.
Durante los meses de verano, que es la temporada de calor, la radiación solar y la temperatura es mayor, por esta razon tu rostro puede sufrir erupciones, irritación, exceso de grasa, aparición de manchas, etc.
Para evitar que estos factores alteren tu cutis, hay que realizar algunos cambios sencillos y básicos en tu rutina de belleza habitual. Estos tips te ayudarán a mantener tu cara fresca y hermosa!
Limpieza facial
Durante el verano el clima puede hacer que tu rostro sude más de lo normal y que los productos de maquillaje se derritan fácilmente por lo que una buena limpieza es imprescindible. Te recomendamos que después de desmaquillarte uses jabones suaves e hidratantes que creen espuma y que dejarán tu piel muy fresca.
Exfoliación
¿Sabías que las células de la piel mueren con mayor facilidad durante el verano? Esta es una razón poderosa para incluir un exfoliante en tu rutina de belleza. Las células muertas hacen que la piel luzca opaca, sin brillo y con más propensión a los molestos barritos. Te recomendamos exfoliarte la cara una vez a la semana para eliminar la suciedad en la piel.
Tónico o esencia
Para que tus poros no se abran por las altas temperaturas, usa un tónico sin alcohol que contenga vitaminas y minerales. Además de refrescar la piel, el tónico repara los daños, nivela el pH y mantiene la hidratación adecuada.
Sérum con antioxidantes
Así como la humectación es clave en invierno, aplicar antioxidantes lo es en verano. Este ingrediente neutraliza el daño de los radicales libres causado por el sol, logrando defender tu piel de la sequedad, las manchas, la opacidad y las arrugas. Busca un sérum a base de vitamina C, E o cualquier otro tipo de antioxidantes y úsalo cada mañana.
Mascarillas
Las mascarillas en gel, crema o tela son opcionales, pero perfectas para evitar el exceso de grasa en esta temporada de calor. Su uso frecuente evita la aparición de barritos, irritación y poros negros. Busca la que mejor se adapte a tu piel y aplícala al menos dos veces a la semana. Para una mayor penetración, cuando tengas puesta la mascarilla, pasa un rodillo facial encima que además te dará un masaje súper rico y descongestionante.
Hidratante ligero
Durante la primavera y el verano, la humedad y las altas temperaturas son la principal causa del brillo en tu rostro. Para tener una piel mate o lo más controlada posible, lo mejor es usar hidratantes ligeros en gel que te ayuden a nivelar los niveles de grasa pero evita los que tienen base de aceite.
Protector solar
No puede faltar en tu rutina de belleza de todo el año y en especial en los meses de calor. Escoge el que mejor se adapte a tus necesidades. Por ejemplo, ligero y mate si tienes piel grasa, en crema hidratante si tienes piel seca, con color si quieres emparejar el tono o con ingredientes calmantes si tu tez es sensible.
Y recuerda que la constancia al aplicar tu rutina de belleza es la clave para una piel hermosa.