Por: Diana Chumley.
Frecuentemente las personas me preguntan: ¿Qué debo estudiar para ser emprendedor?, ¿Cómo puedo ser emprendedor?, ¿Qué debe aprender un emprendedor?
Primero que todo, Emprender es una decisión que influye en todas las etapas de la vida de una persona; en el aspecto personal, profesional, familiar, etc.
Para lograr nuestra capacidad emprendedora, debemos desarrollar ciertas habilidades, de las cuales te estaré hablando más adelante.
Aunque existen carreras universitarias, tecnologías relacionadas con el área administrativa y financiera, estas no nos proporcionarán la formación como emprendedor. Es decir, estos estudios nos van a formar en cómo crear una empresa, cómo administrarla, pero para ser emprendedor se necesita el desarrollo de habilidades y actitudes que sólo se pueden adquirir a través de la experiencia.
No importa cuántos cursos tomemos o cuántos libros leamos, al final, lo único que nos garantizará el pleno desarrollo de los conocimientos, habilidades y competencias que requerimos para tener éxito en los negocios, es que llevemos a la práctica nuestras ideas y proyectos. ¿Qué habilidades y competencias debemos desarrollar? – Debemos desarrollar habilidades técnicas, como por ejemplo la aplicación de procesos y procedimientos. Habilidades humanas, Aprender a interactuar y comunicarnos efectivamente con clientes, miembros del equipo, proveedores, etc., ser el puente de conexión con calidad humana, valores y ética, para así poder alcanzar las metas trazadas (como Liderazgo, Inteligencia emocional, manejo de estrés, manejo de conflictos y comunicación asertiva y efectiva). Habilidades Conceptuales las cuales se relacionan con la generación de ideas, desarrollo de conceptos, innovación, creatividad, manejo de entorno y planificación.
Hay que tener en cuenta que cada proceso de emprendimiento es diferente, pero todos los emprendedores pasamos por la etapa; para cambiar nuestra mente a una Mentalidad emprendedora debemos estar dispuestos a salir de nuestra zona de confort, de rediseñar esos paradigmas que nos hemos o nos han creado con respecto a nuestra forma de ser, pensar o actuar. No es una tarea fácil, pero tampoco es imposible de lograr. Existen personas que tienen una mentalidad emprendedora innata, otras se han visto en la obligación de desarrollarla por situaciones exteriores y circunstancias de la vida; no importa cuál sea el caso, el resultado debe de ser “aprender a pensar como empresario”.
En esta etapa el emprendedor comienza a desarrollar habilidades como la automotivación, la autodisciplina, potencializa su intuición y comienza a formar un carácter inquebrantable, el cual le permitirá enfrentarse a los retos o obstáculos que encontrará sin duda en el camino.
Existen varios recursos que podemos comenzar a utilizar para trabajar en el cambio de mentalidad a una mentalidad emprendedora, por ejemplo:
Rodéate de gente emprendedora, recuerda que tus relaciones personales y profesionales influyen 100% en tu mentalidad. Rodéate de personas que te inspiren, que te reten, que siempre traten de sacar tu máximo potencial.
Lee, crea el hábito de la lectura, existe gran material sobre temas empresariales y de desarrollo personal los cuales te llevarán a ese alineamiento que tanto buscas para llegar a ser un empresario exitoso. Para comenzar la rutina de lectura les recomiendo el Libro: Emprender es una forma de vida por Carlos Nava.
Asiste a eventos motivacionales. Escuchar historias de otros emprendedores es una fuente de motivación y aprendizaje muy poderosa, además que en estos eventos puedes conocer otros emprendedores como tú.
Vete a vender, Las ventas te ayudarán a desarrollar habilidades y capacidades muy importantes para los negocios.
Por último, Toma acción, Tal cual como si estuvieses aprendiendo a montar en bicicleta, trata de lograr el equilibrio para tomar confianza y animarte a dar tus primeros pasos. Busca la manera de llevar a la acción tus ideas, aunque sea a pequeña escala; lo importante es que tomes acción y comiences a pensar y trabajar como emprendedor.