Por: Marielena Gutiérrez.
Coordinadora de Enlace para Metro Atlanta del Programa GA-SRTS
Algo que llamó mucho mi atención cuando emigré a la ciudad de Atlanta fue la cantidad de vehículos a grandes velocidades transitando por sus amplias autopistas. Ignoraba en ese momento, que cuando de cantidades de automóviles se trata, Georgia lleva la delantera. Pues para el año 2019, el estado tenía 34,4 millones de vehículos registrados.
Todo lo que comprende al área metropolitana de Atlanta y sus suburbios tiene una dinámica muy particular en cuanto al desplazamiento de sus pobladores, caracterizada mayoritariamente por su traslado en vehículos particulares. Por ello el protagonismo lo lleva el conductor.
El hecho de que con frecuencia muchos de nosotros de forma inconsciente prioricemos el uso del celular sobre el del volante está asociado con una elevada incidencia de accidentes automovilísticos, muchos de ellos con un trágico final. Lo que invita, indefectiblemente, a hacer un alto o al menos a hacernos algún tipo de cuestionamiento. ¿Adicción al dispositivo? Probablemente, en muchos casos…
La OMS acuña el término adicción a “cualquier actividad que una persona no sea capaz de controlar, que le empuje a comportamientos impulsivos que perjudiquen la calidad de su vida”.
El celular ciertamente es una herramienta de apoyo en nuestro acontecer diario. Sin embargo, al desplazarnos en una máquina que pesa alrededor de 3 toneladas, es vital entender que al hacer de éste cualquier uso distinto al de servir como GPS, podemos estar comprometiendo nuestras vidas y las de otros. Las estadísticas así lo reflejan.
La NHTSA señala que, en el año 2018, ocurrieron en los Estados Unidos 6.283 muertes de peatones por accidentes vehiculares, 262 de las cuales sucedieron en el estado de Georgia. Por su parte, el CDC menciona que “A 55 millas por horas enviar o leer un texto equivale a recorrer el largo de un estadio de futbol con los ojos cerrados”. ¿Cuántos “estadios de fútbol” estarán siendo recorridos de manera simultánea a ojos cerrados diariamente por nuestros conductores? ¿Te encuentras en este grupo?
Muy probablemente demos por sentado que nada nos va a ocurrir mientras hacemos un poco de “malabarismo en la vía” sin tomar en cuenta nuestra imposibilidad para mantener nuestros ojos puestos en dos lugares distintos al mismo tiempo. Adicionalmente al uso inadecuado del celular mientras conducimos, nuestra mente, específicamente nuestra “falta de atención” es considerada como el principal elemento distractor en la ruta. Mente, ojos y ambas manos, deben estar involucrados en todo momento mientras conducimos. Maquillarse, peinarse, consumir alimentos, también están en la lista de distracciones.
El 1 de Julio de 2018 GDOT puso en efecto Ley de Manos Libres de Georgia, cuyas penalidades incluyen multas monetarias y puntajes en la licencia de conducir. Esta estrategia del Departamento de Transporte busca reducir accidentes de esta índole. La ley es importante, pero mucho más lo son nuestra conciencia y cambio de hábitos. Estar claros en que todos estos accidentes y muertes son prevenibles significa entender que, en nuestras manos, literalmente hablando, se encuentra la solución.