¡Estamos de vacaciones! Tiempo de Calidad y crecimiento familiar

Por: Vivi Flores

Terminaron las clases y con ellas llegaron las vacaciones tan esperadas por nuestros niños y para la vida familiar, es un tiempo para reconectarnos, soñar juntos, descansar y recargar energías para el próximo año escolar.  Con ellas, llegan también nuevos retos, ya que como bien sabemos implica modificaciones en los horarios, rutinas en el hogar, así como en los trabajos de los padres.

Pero no se alarmen que para cada reto hay siempre un ¡buen plan! Nos enfrentamos con el tener que idear actividades significativas, que nutran a nuestros niños y que apunten a llenar sus tanques emocionales y de cercanía con nosotras.

Entonces ¿cómo logramos encajar todo esto en nuestras agitadas agendas?

Tratando de balancear mi propia agenda con la de mis hijos me viene al corazón lo que dice el Libro de Proverbios 21:5 “Los planes bien pensados: ¡pura ganancia! Los planes apresurados: ¡puro fracaso!”  Nada más cierto que eso, significa que debo sentarme a considerar cada uno de mis días en los que mis niños estarán de vacaciones y asignarles un propósito. He aprendido que debo decirle a mis días como quiero que luzcan y no que los días y sus demandas me tomen desprevenida y por sorpresa sin tener un plan a seguir.

He aquí algunos consejos a considerar a la hora de armar el plan:

  1. Incluye a tus hijos. Te sorprenderás de la gran creatividad que ellos tienen para ingeniarse actividades con las cuales han estado soñando durante el año escolar y que por falta de tiempo quedaron rezagadas, hasta la tan esperada oportunidad de llevarla a cabo en el tiempo libre de las vacaciones. Cuando te sientas a escuchar sus ideas y compartirlas juntos se produce un sentido de “trabajo en equipo” que los hace sentir especiales y como parte importante dentro del plan, además la idea es pasarla bien con cosas que ellos disfruten. ¡Claro! tú tienes la última palabra en temas de presupuesto, pero aún esto es algo para considerar juntos.
  1. Pon las ideas en el calendario. Con mis hijos hemos ideado una lista de posibles actividades, por ejemplo, lugares que ellos quieren visitar (parques, piscinas, “playdates” en casa de amigos o en la nuestra, noches de película, salidas a patinar, visitas a la biblioteca local, eventos familiares, salidas a recoger fresas en huertas, viajes en familia a la playa etc. Todas estas ideas son excelentes, pero a la hora de visualizarlas en el calendario y al asignarles un día y hora específica, ellos toman conciencia de que no todo lo que quieren es factible, reduciendo así frustraciones y permitiendo un mejor diálogo y trabajo en equipo. Los niños son muy visuales y esta es una excelente herramienta que les crea estructura y expectativa.
  1. Elabora un horario diario de “vacaciones útiles” (de lunes a viernes). Por ejemplo, con mis hijos trabajamos el año pasado un horario para la primera parte del día que incluyó periodos cortos de 30 a 40 minutos diarios de práctica de lectura, escritura y matemáticas, así como de crecimiento espiritual. La idea de “vacaciones útiles” dispone sus mentes y corazones para entender que esto es una preparación para su vida adulta. Aunque ellos estén de vacaciones, algún día deberán trabajar para ganarse el sustento y esto de alguna manera les ayuda, a no sólo practicar las destrezas aprendidas en la escuela, sino a ganarse y valorar el premio de su esfuerzo. Asegúrate de incluir esto en el horario diario y luego coloca en este mismo horario el premio por su labor, que puede ser: tiempo monitoreado en video juegos, tiempo viendo tele, invitar a algún amigo a jugar, salidas al parque, piscina, patinaje, cocinar su platillo favorito, etc.

Y por último, pero no menos importante:

  1. Incluye un tiempo para ti. Sí, leíste bien, el tiempo que te asignes a ti, les enseñará que mami también tiene otras tareas, funciones, responsabilidades y que necesita tiempito para descansar. Aunque no sea demasiado largo, el descanso, sobre todo, es clave para que sigas adelante en tu tarea de mujer virtuosa con una buena actitud.

Por supuesto, siempre ocurren imprevistos los cuales harán que el plan no se cumpla al pie de la letra, pero si lo tienes, tus días serán más llevaderos y significativos. Solo asegúrate de seguirlo y de celebrar lo que sí pudieron hacer juntos en familia.

Espero que estas ideas te ayuden a aprovechar cada día que Dios te ha asignado a ti, mientras dedicas tiempo de calidad a administrar sabiamente la vida de tus hijos.

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